5.8.08

Peronist Friendly



¡Si señores! Jugo de Ladrillo no le hace asco a nada: art nouveau, trotskismo, jazz electrónico y ahooooooraaa... ¡Putos Peronistas!. Palo y a la bolsa. Nada de ese marxismo cuadradito y lineal, aquí nos animamos a todo y somos esencialmente diversos y divertidos. Putos Peronistas, a ver qué tenemos acá... Si el materialismo dialéctico puede con esto, es que puede con todo.

No los entretengo más y doy la palabra a los protagonistas que afirmaban al diario Crítica:

"Todos creen que es una cargada porque hablamos de putos peronistas, pero lo decimos en serio: somos un espacio militante, no un gueto", explica el joven Pablo Lucero, mendocino, gay e integrante de la Doble Pe, la sigla que identifica a la Agrupación de Putos Peronistas de La Matanza, la primera organización política que reúne a hombres y mujeres gays de las barriadas más pobres del conurbano bonaerense.

¿Qué tul? No sé bien qué pensaría El General Bimanco de todo esto, pero seguro que hoy día no pondría reparos. Todos creen que es una cargada, claro, por lo que desgranan algunas gracias de mínimo esfuerzo como "desensillar hasta que aclare" o "justo donde acaba la columna vertebral del Movimiento", etc.

Pero no señores, esto es serio:

"Representamos al homosexual de los barrios humildes que carga con una doble condena: primero por su condición sexual y segundo por su condición social. Somos los pantaloneros, los costureros, los peluqueros y las travestis con silicona barata", explican en su convocatoria para la organización del Primer Congreso de Homosexuales Peronistas. Se iba a concretar en estos días, pero fue postergado por el conflicto del campo.

Este tema ya fue tratado en "Los travestis con silicona barata como sujeto significante político del deseo" brillante ensayo que Julia Kristeva le quiso afanar al inmenso Dr. Posme Cosmopolitano, sociopsicólogo y orientador didáctico de Palermo Chico presidente de la Sociedad Lacan Vuelve y activo promotor del Club del Trueque, en el que intercambia sesiones de terapia de vidas pasadas por morcipanes.

Los pantaloneros, los costureros y los peluqueros de las barriadas postradas son un precioso material de estudio con el que se regocija todo bípedo intelectoporteño con veleidades progres que se precie. Porque todos sabemos que no se trata de terminar con el barro de la miseria sino de hundir nuestras manos en él con el enorme placer de saber que en cuanto queramos tenemos a mano un coqueto lavatorio.

"Lo íbamos a hacer entre el 28 de junio y el 1 de julio, pero la coyuntura nos corrió los tiempos", cuenta Pablo Ayala, un militante peronista de 30 años que ya cumplió siete viviendo con su pareja. Las fechas no eran azarosas..

La historia registra el 28 de junio de 1969 como la primera resistencia gay contra la discriminación, cuando los habitués del bar gay británico Stonewall se hartaron del maltrato policial y salieron a la calle a repudiarlo. "Y el 1 de julio es por otro aniversario de la muerte del general Perón", cuentan ambos. Piensan concretar el congreso en la primavera con rama femenina incluida. El colectivo ahora cuenta con unas 15 militantes lesbianas que posiblemente se autodenominen Tortas Peronistas.


O sea: se trata de seguir con el estereotipo posmo pero en clave mersa: gays&lesbians = putos y tortas... Es notable como TODO es cuestionable menos las diferencias de clase.

Ellos hicieron su estreno el 17 de noviembre de 2007, cuando marcharon en el Día del Orgullo Gay argentino, que se concretó en la misma fecha que la tradición peronista celebra el primer regreso de Juan Perón a la Argentina en 1972.

"En el Día del Militante decidimos hacernos presentes por primera vez en la marcha que se realiza todos los años en defensa de la diversidad sexual", recuerda Ayala, quien esta convencido de que "sólo la Argentina puede lograr un espacio revolucionario para los homosexuales postergados". Se dio cuenta el 17 de octubre de 2006, cuando trasladaron los restos de Perón a la quinta de San Vicente.


¡Ah, menos mal! La que se armó ese día fue inolvidable, y si entonces no te diste cuenta de que el peronismo es revolucionario, no te das cuenta más.

"Ahí me llamó mucho la atención ver a un par de travestis emocionados saludando la cureña. Cuando me acerqué, me dijeron algo que no me voy a olvidar nunca: "El puto es peronista, y el gay es gorila". Eso me hizo clic en la cabeza…

Madonna Quiroz disparando para no matar a nadie, los muchachos del mionca a los palazos con los de la construcción, el cadáver del general desmanado y los travestis saludando la cureña: ¿Fellini? ¿Y ese quién es?.

Pero la realidad argenta sigue pulverizando paradigmas: "El puto es peronista, el gay es gorila", cosa que se le escapó a Marx, quien habría entendido un par de cosas sólo de haber nacido en esta generosa tierra.

"… y desde entonces nos encontramos con la palabra de Néstor Perlongher, el poeta que fundó el Frente de Liberación Homosexual de 1973, que reivindicaba al hombre afeminado como sujeto subversivo frente al que se refugiaba en su masculinidad para negar el paradigma conservador."

Claro. ¿Cómo se asusta a un fascista? ¿Con un fusil? Olvídelo, eso es setentista y no da resultado. Hoy día se aterroriza al guardián del sistema "cuestionando su masculinidad" ¿Y cómo? Muy simple: para cuestionar la masculinidad de un sujeto, destroce la suya propia para ponerlo nervioso. Proclame su propia intimidad de la forma más degradada posible, reivindíquese lumpen y marginal, en el extremo, fuera del sistema, outsider, francotirador, inconformista, rebelde, transgresor. Gracias a esta postura intransigente y esta voluntad férrea de permanecer en los márgenes conseguirá un programita de radio y podrá montar su show en plena calle Corrientes.

Y Perlongher... ¿qué decir de Perlongher? No llegó a tener programas de radio, pero gracias a él y a otros como él hoy lo tiene Fernandito Peña. La izquierda cultureta simpatiza con estas cositas: cuanto más puto y caca y semen y barro y reviente y humedad y mugre y malos olores y pegajosidad y miseria y estar incómodo y ser muy infeliz; mejor. Esto basta para olvidarse de todo, incluso de que un libro es sencillamente ilegible.

Desde entonces, postulan que luchan por "vivir y amar libremente en una patria liberada, porque no hay posibilidad de asumir nuestra identidad si nuestro país no se realiza en la forma que lo desea su pueblo". Y saben lo que dicen. "Militamos y contenemos a gente que no tiene laburo y que la pasa muy mal. Hay muchos desocupados, cartoneros y chicas travestis con HIV y desvalidos que están olvidados de la política por completo. Esto es González Catan: acá no hay INADI, no hay Comunidad Homosexual ni nada. Acá bancamos porque somos peronistas", explica Lucero.

O sea que el entretenimiento de la identidad sexual como postura política ya no es exclusivo de los homosexuales pequebu sino que ahora vamos a venderlo entre los hundidos. Intentemos convencer al peluquero y al pantalonero de que pertenecen a una categoría política especial, que el aluvión de miseria que se tragan todos los días se relaciona específicamente con su identidad sexual y no con el hecho de que no tienen un mango en el bolsillo. Que sigan soñando con ser Karl Lagerfeld.

"Por eso queremos ser los panteras negras del puterío peronista argentino", agrega Ayala...

Demasiado tentador ¿Me puedo prender? Traje el catsuit.

…y "si el poder entiende que hay un sector del pueblo que es víctima de la peor discriminación sexual, habremos dado un paso.

Proponerse que el poder entienda es una tarea ardua y además inútil: el poder entiende perfectamente todo.

"Me pasé todo el menemismo limpiando baños y me consta que nadie se anima a darles trabajo a los putos más caracterizados", resume Ayala con tristeza, porque por falta de trabajo su compañero Lucero debe volver a Mendoza, su tierra natal y una de las provincias más conservadoras.

En pocas palabras: se trata de que la miseria sea también gay-friendly. Si se puede embotar a la pequeña burguesía con carnavales de todo tipo y convencerla de que "hace política" ¿por qué no probar lo mismo sólo que en un estamento social inferior? Infinitas posibilidades de marketing se abren.

Evita vuelve, y ahora les dice: "¡Mis grasitas putos!". Y otra vez: nadie se ofende.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Ay, ay, ay...¡la que se viene!

Yo lo que creo, es que Fellini es gorila y Favio es peronista. No se vos....

Anónimo dijo...

Oiga. No es demasiado?
Se mete con la autovictimización judía, se mete con la parafernalia feminista, ahora se mete con la intocabilidad progre de la condición gay.
Me llama la atención su manera de ganar amigos.

werte dijo...

Es cierto que hay algo de parodia de género, pero en este caso parece más "parodia de parodia", o sea, que no toma como objeto burlesco la norma heterosexual sino la norma gay, una reintroducción de demandas clasistas en ese tedio del mundo gay burgués y restorantero. No me parece que se trate de algo reaccionario. Al contrario, parece una forma inteligente de llamar la atención.

Inspeculum dijo...

Mis respetos, señor.
Seguiré sus pinceladas críticas con el afán con que miro un Argentina-Brasil de final abierto, mire lo que le digo.
Me cae bien la gente que lleva sus conclusiones a pastar al desierto de los tártaros, no sé si me explico.
Saludos cordiales
A.

Jack Celliers dijo...

Brasil... je, lo de San Vicente Favio se perdió de filmarlo. Hubiera sido muy lindo escucharlo explicar lo de San Vicente en vivo como explicaba lo de Ezeiza ¿no?

Milkus: No sé si "me meto con la intocabilidad gay", no creo que los gays sean "más tocables" (si me permite el garbeo semiindecente) que el resto de la humanidad.

Es más, la gente que describo en el post tiene mi acongojada simpatía. Acongojada porque se les está mintiendo al decirles que sus gustos en materia sexual tienen más relevancia política que casi ninguna otra cosa y que se dejen arrastrar por eso.

En otras palabras: el feminismo me parece mentiroso y dañino, "lo gay" como hecho político me parece inconducente y hasta caricaturesco, pero esto no significa que no tengan derecho a reclamar ser tratados como lo que son: gente.

Werte: Creo que entiendo lo que decis, pero no lo comparto. Sí, es verdad que en "lo cultural gay" se ha introducido la clase, pero no me parece que la respuesta sea "vamos a crear la cultura gay de abajo", lo ultimo que necesita una persona que vive en la miseria es entretenerse con el mismo fetiche que otras personas con las que no comparte nada más que algo tan personal como lo que llamamos "orientación sexual".

Qué se yo, por ahí me equivoco, pero en resumen quiero decir que me parece al reverendo pedo.

Inspeculum: ...lleva sus conclusiones a pastar al desierto de los tártaros...

Pavada de elogio, espero merecerlo. Gracias.

Severian dijo...

Este país es maravilloso...

A mi me cayeron muy divertidos. Quiero decir, no espero que esos pobres pibes entiendan mucho de política, por algo son peronistas. Pero, valga la contradicción, hay ser macho para gritar "soy puto" en una unidad básica de La Matanza.