5.7.10

Más muertos



Ya sabemos que otro chico –esta vez de 15 años- fue muerto por la policía. Balazo en la cabeza y por la espalda, como saben hacer los bravos defensores de la ley y el orden.

Las ridículas explicaciones posteriores sobre accidentes desafortunados no están destinadas a que nadie las crea, de hecho nadie las cree. Ni los familiares del chico, ni la gente con un mínimo de sentido común, ni tampoco los miserables que apoyan al policía, a los que su inocencia o culpabilidad les trae sin cuidado, sencillamente convalidan el asesinato de manera más o menos abierta.

Bariloche es una ciudad de contrastes, con gente que hace buen dinero gracias al turismo, y gente que participa de la pobreza argentina general. Estos últimos son, por así decirlo, material de descarte. Si mueren mala suerte y a otra cosa, mientras no se toque a la gente decente.

Más muertos. Ya suman muchas decenas los jóvenes que mueren en "democracia" no por ser guerrilleros, ni siquiera por comunistas; mueren porque la policía puede matarlos impunemente gracias a un sistema judicial podrido hasta la náusea. Y ya son muchas las familias que han enterrado a sus hijos sin ver ni un asomo de justicia, sufriendo en muchos casos las amenazas mafiosas y aguantando.

Más muertos. El padre del chico –según lo que leí en los diarios– pidió que no suelten a su asesino porque "no sabe lo que va a hacer" si eso ocurre. Y es perfectamente entendible; son muchos los que no saben qué hacer frente a tanto dolor. No sé si alguien toma nota, si es que nos damos cuenta de lo que pasa, pero yo creo que es muy claro: más y más violencia ejercida con toda impunidad y sin otro motivo aparente que sembrar el terror en un sector definido de la población, que casualmente es el más débil.

Más muertos. Si alguien piensa que el crecimiento de esta cifra es indiferente en términos de violencia social, me parece que se equivoca. Estamos en "democracia", por suerte no hay violencia política ¿verdad? Esperemos entonces que no haya algún "violento" que se tome la justicia por mano propia en lugar de esperar pacientemente a que nada ocurra mientras se le ríen en la cara.

Más muertos. Paciencia ha habido infinita, ni un solo asesino ha sido asesinado, por suerte nadie ha declarado una guerra abierta a estos animales. Lo que quiere decir que en términos sociales la Argentina está siendo muy afortunada. Para no seguir jugando a la ruleta rusa, no estaría de más que alguien que mató por la espalda a un chico pague con cárcel efectiva. No mandar a la cárcel a un asesino es violencia, la Argentina es un país violento, y si esa violencia no se generaliza no se debe precisamente a las autoridades ni a los responsables de proveer orden, seguridad y justicia sino gracias a la responsabilidad, el temple, la paciencia y el sufrimiento ahogado de muchas personas que esperan –aún esperan– que esa justicia sea algo más que una palabra.

La justicia no tiene por objeto sólo compensar a las víctimas sino algo más importante: mantenerlas dentro del sistema. No se puede pedir respeto por las reglas si quien debe hacerlas cumplir no lo hace. Pedir cárcel para el asesino no es pedir sólo justicia, es pedir una sociedad con un futuro algo menos incierto.

9 comentarios:

Luz dijo...

Hola Jack

Me parece que la idea base de la existencia de la institución JUSTICIA es que en lugar de agarrar un palo o un lanzallamas y prender fuego a otra persona que te hizo daño, vas a los tribunales, hacés una denuncia y te sentás a esperar (algo más tranquilo) que el juez se cobre tu venganza.

Es delegar en otro, que se supone que va a resolver las cosas sin que corra sangre.

En realidad creo que la justicia no es más que eso: un espacio donde vas a quejarte, a hacer catarsis (como a un psicólogo) y hay un tipo que te calma y te dice, vos dejame a mi… entonces se da vuelta y se pone a rascarse el ombligo con una Bic.

Por el otro lado, el acusado, tiene un ejército de abogados que adoran defender gente culpable… pero esto no tiene ninguna gracia, si no logran convertir todo en un pastiche inmundo, tuercen la mentira hasta que parece verdad, donde al final no se sabe quién es culpable y quién inocente y cuál sería el delito.

Para cuando las cosas se resuelven, ya pasó tanto tiempo que ya ni te acordás de cómo empezó la historia. Ya se te pasó la bronca porque estás viejo y choto y no tenés más ganas de renegar.

Y mientras tanto, un montón de tipos cobran sueldos inconmensurables y van por la vida recibiendo reverencias. A eso le llaman Justicia.

Jack Celliers dijo...

Venganza no me parece una palabra adecuada, no es lo mismo.

La práctica de justicia es un mensaje para toda la sociedad: si hay impunidad para el que mata, entonces el mensaje es claro. La impunidad habitual sienta las bases para la anomia, para el descreimiento y me parece evidente que esto conlleva violencia social.

Aquí no se está pidiendo nada relacionado con los medios de producción, se está pidiendo al estado burgués que cumpla con lo que se supone son sus preceptos básicos, eso que nos venden todos los días acerca de la seguridad y la igualdad ante la ley.

En democracia se supone que el libre ejercicio de la opinión no debe ser un factor de riesgo, y es más grave si ese riesgo proviene de las fuerzas que -siempre según el simpático manual que consagra a la democracia como "el mejor sistema posible"- deberían garantizar y proteger ese derecho.

Por eso me pregunto todos los días qué cosa es "democracia", qué entendemos por ello y hasta qué punto puede estirarse la definición en tanto haya rituales idas a las urnas papeleta en mano. Porque el chico asesinado no podrá votar nunca, se le negó ese derecho como se le negaron todos los derechos.

Severian dijo...

Ya lo dije alguna vez, admiro el temple de esas familias. Hay que ser un tipo especial de persona, tener algo que busco en mi y no puedo encontrar, para perdonarle la vida a quien te deja sin nada que perder.

Las normas de convivencia social son convencionales, no naturales. Son acuerdos entre personas, no imposiciones del universo sobre ellas. Hay que tener mucha fuerza de voluntad para seguir respetándolas cuando alguien te quita cualquier razón para hacerlo.

Yo hubiera durado 10 minutos en el lugar de uno de esos padres. En el minuto 11 hubiera matado al asesino.

Luz dijo...

Amigo Jack

Mi vómito de escepticismo es horrible, pero es lo que siento cada vez que pasa (y pasa bien seguido) un hecho como el que nos ocupa.

Además, lamentablemente, lo digo con conocimiento de causa, porque trabajo adentro del “sistema judicial podrido hasta la náusea”… ese laberinto de instancias, decisiones de jueces convalidadas o no por fiscales y la noble intervención de la defensoría (que es defensoría de pobres, ausentes e incapaces) debería dar un resultado bastante parecido a la justicia, o al menos lo más lejos posible de lo injusto.

Sin embargo, la justicia viene a estar compuesta por un 5% de hijos de puta que toman las decisiones basados en su ideología (la de los ganadores del sistema), un 90% de gente a la que no le importa nada y carecen absolutamente de sentido de justicia, y un triste 5% restante que hacen lo que pueden.

El 5% de hijos de puta deciden sobre cosas tan menores como la libertad, la vida, los sentimientos, miedos y bienes de las personas. Y lo hacen desde un pedestal de desprecio tremendo por el resto de la sociedad. El 90% terminan siendo funcionales a los hijos de puta, porque sólo les importa el jugoso sueldo a fin de mes.

Podría escribir un libro con las alternativas que conozco.
Desde jueces y fiscales que ganan arriba de 20 lucas y llegan a trabajar a las 11 de la mañana, en su puta vida leen un expediente, se la pasan socializando y doctoreándose en los pasillos, pasando por tilingas que están ahí sólo para la pilcha y las cirugías estéticas y que no leyeron un libro entero jamás.

Eso convierte a un proceso judicial en una farsa. Un infinito laberinto donde se desperdician resmas enteras de papeles al pedo que nadie lee.

Kafka se quedó re chico.

Y todo eso me hace rezar y suplicar que por favor dios nunca me castigue poniéndome en el lugar de un acusado de algo, frente a un tribunal de justicia.

No es llamativo que cada hecho de violencia policial genere movilizaciones y marchas de pedido de justicia. Sabemos que si no es bajo presión, nada se resuelve.

Se impone una reforma profunda, que abarca desde la designación de jueces, fiscales y demás yerbas, hasta un seguimiento finito del trabajo y del cumplimiento de los plazos.

Severian dijo...

se la pasan socializando y doctoreándose en los pasillos

Hay algo notable en esa fruición por el doctoreo que tienen los cuervos. Una vez le pregunté a una jueza de faltas "¿Ud. es Fulana?" y la mina me contestó con desprecio "no, yo soy la doctora Fulana" marcando bien el título. Lo gracioso es que a mi, que a diferencia de ella realmente hice un doctorado, me daría vergüenza remarcarlo de ese modo... Será de puro plebeyos que somos la mayoría de los científicos, que a ninguno se le dá por utilizar su título de un modo tan nobiliario....

brasil dijo...

Se que lo que sigue tendrá un tufillo facho. Hay valoraciones que terminan siendo verdades absolutas, y una de ellas es que toda violencia que provenga de un lado es justificable para unos y execrable para los otros y viceversa...

Dice Jack (y coincido)

"La práctica de justicia es un mensaje para toda la sociedad: si hay impunidad para el que mata, entonces el mensaje es claro. La impunidad habitual sienta las bases para la anomia, para el descreimiento y me parece evidente que esto conlleva violencia social."

Agregaría que la impunidad es hoy no solo para el poder o la "polidelincuencia", sino para la delincuencia a secas

En el medio quedan los pobres (todos estigmatizados), la clase media -boluda como siempre- que quiere que maten a todos los pobres por chorros y delincuentes, o si son "progres" creen que todo el delito es producto de una injusticia previa y merece indulgencia.

Mientras tanto la impunidad es generalizada. Pareciera una mala película de ciencia ficción en la que la burguesía y sus políticos viven en ciudades amuralladas y el resto que se odie, mate, o arregle como pueda...

Cuando me convertí en víctima, y 4 energúmenos entraron en mi casa, destruyeron todo, aterrorizaron a mis hijos y a mi mujer, lo que hizo "La justicia", fue archivar la causa en menos de 60 días, sin que el fiscal me llamara una sola vez.

Y más claro fue el oficial a cargo de la policia que me escupió: "Uds. los civiles, esperan todo del Estado: juntense los vecinos, pongan unos mangos y yo les pongo un servicio adicional todos los días"

Le hice caso a medias, use parte de mi dinero no para pagarle a el, sino para comprarme una Glock 40 que llevo en la cintura constantemente. Y para vivir miserablemente todas las noches, esperando que algo de mueva.

La burguesía ha descubierto un nuevo y eficiente modo de dominación: el abandono total del Estado, y la falta de cualquier política de Estado que restaure no solo el bolsillo de los pobres, sino su dignidad: O se cagan viviendo la vida de mierda que les dieron, o delinquen . Y los otros o se cagan o los matan.

Estoy un tanto "oscuro". Y si. No es para menos

Jack Celliers dijo...

Brasil: La policía siempre da sanos consejos para la promoción de la libre empresa. Ud. es un vago que quiere vivir del estado y pretende que le dé seguridad, y es tan delirante que hasta se le ocurrirá pedir que le dé trabajo.

Seguridad, educación, vivienda, salud, son bienes preciosos. Por eso sólo son accesibles a quien paga, mi amigo.

La impunidad es para la delincuencia a secas, sí, pero sólo si esa delincuencia la emprende contra los trabajadores y los pobres. Los delincuentes lo saben, por eso atacan a quien no puede defenderse,

Por mi parte, no me parece facho tu comentario. No comparto la infinita comprensión de la izquierda para con la delincuencia. El delincuente reproduce la lógica del capitalista, es un entrepreneur de la violencia, normalmente un pelotudo, pero un pelotudo peligroso.

Desde mi punto de vista un ataque a una familia trabajadora es un ataque a una familia trabajadora, y no hay por qué tolerarlo ni de la burguesía, ni de la policía, ni de un delincuente.

La solución me parece que pasa por la autoorganización donde sea posible. Ya sé que es algo muy difícil, pero -dentro de un contexto de tareas más amplio- defenderse de la delincuencia me parece tan legítimo como defenderse de la policía.

Jack Celliers dijo...

Y lo lamento, lamento lo que te pasó y lo que te ves obligado a hacer. Una mierda.

Nacho dijo...

Recomiendo esta nota.